Uncategorized
Entre el cielo y el infierno
En el año 2015, luego de salir de clase, un automóvil me atropelló. El choque fue tan fuerte que me elevé varios metros y me fracturé huesos como la tibia, el peroné, la escápula y la clavícula. Fue una época difícil, pues una silla de ruedas acompañaba mis días y Leer más…